Carla Ayelén Baez fue sentenciada a 5 años de prisión, mientras que dos hombres recibieron las penas de 4 años y 16 años y 6 meses de cárcel, respectivamente. Los hechos ocurrieron en mayo y junio de 2020.
La hija de Carlos “El Cartonero” Baez, uno de los testigos del crimen de Alicia Muñiz a manos de Carlos Monzón, fue condenada a 5 años de prisión por vender droga en un casa y un local comercial del barrio Aeroparque.
Además de Carla Ayelén Baez, dos hombres identificados como Cristian Ariel Perales e Ignacio Catán recibieron las penas de 4 años y 16 años y 6 meses de cárcel, respectivamente. El fallo se conoció semanas atrás luego de la realización de un juicio abreviado al que accedieron, por elección, los propios imputados en la sala del Tribunal Oral Nº 3.
La causa que llegó a debate había sido investigada por el fiscal de Estupefacientes, Leandro Favaro, quien logró probar junto con el persona policial que los tres acusados comercializaron cocaína al menudeo entre mayo y junio de 2020, en una vivienda de Alice al 7400 con conexión a un local de Della Paolera al 2000. El juez Gustavo Fissore aceptó el acuerdo alcanzado por las partes y dictó su veredicto, en el que tanto Baez como Catán, que son pareja, fueron declarados reincidentes.
Debido a ello, le impuso una pena alta al hombre, que ya había sido sentenciado a 13 años y 6 meses de prisión previamente por otros delitos. En tanto, el magistrado coincidió con el fiscal en que, por los elementos secuestrados y el accionar que tenía la organización, no podía ser considerada una asociación ilícita, lo cual hubiera valido una condena superior según se desprende de tal figura delictiva en el Código Penal argentino.
La investigación se desarrolló entre el 9 mayo y el 11 de junio de 2020, lapso en el que policías se apostaron en la zona y vigilaron los movimientos que se producían allí. En distintas oportunidades, observaron cómo hombres y mujeres solían concurrir al lugar y permanecer por breves instantes, para después entregar dinero y retirarse con pequeños envoltorios.
En diversas ocasiones, esas personas eran interceptadas más tarde y en su poder se hallaba droga presuntamente adquirida antes. Con esas y otras pruebas -como registros fílmicos, imágenes y testimonios- reunidas en el expediente, la Justicia de Garantías autorizó un allanamiento en ambos inmuebles, que se conectaban en su interior.
Entonces, los pesquisas se incautaron de 84 envoltorios que contenían cocaína en la vivienda de Alice al 7400 y que se hallaban en una bolsa de color verde, y de otros 9 en el local comercial de Della Paolera al 2000. En la primera de las propiedades fueron detenidos Baez, quien habría cumplido el rol de encargada en la organización, Catán y Perales. En suma, se secuestraron elementos de corte y teléfonos celulares que, al ser peritados, conformaron más pruebas incriminatorias.
Los mensajes y comunicaciones que se hallaron en los artefactos también sirvieron para acreditar la autoría de los hechos por parte de la pareja. Además, el análisis químico de los estupefacientes hallados demostró que presentaban un alto grado de pureza y compatibilidad con los narcóticos hallados en los procedimientos previos de interceptación de los compradores.
Al quedar detenido, uno de los hombres denunció que habían existido irregularidades en el procedimiento realizado por la policía y esbozó la versión de que los efectivos habían “plantado” la cocaína. Su versión y la de una testigo por él presentada incurrieron en varias contradicciones, por lo cual tal cuestionamiento quedó desechado tanto de parte del fiscal Favaro como por parte del juez Fissore.
Vale recordar que Carlos Baez, el padre de la mujer condenada ahora, adquirió fama nacional e internacional bajo el apodo “El Cartonero”, cuando se presentó a declarar como testigo del “Caso Monzón”, así denominado por la prensa a fines de la década del ´80, y que tuvo como víctima a la modelo y bailarina uruguaya Alicia Muñiz, asesinada por su ex pareja, el ex campeón mundial de boxeo, Carlos Monzón, en una vivienda del barrio La Florida.